Lo primero que hay que saber es que las casas de bolsa son instituciones financieras que proveen los medios necesarios para comprar y vender productos de inversión. De cierta forma, son como un puente que conecta a los inversionistas con la Bolsa de valores.
Existen diferentes formas para abrir una cuenta en una casa de bolsa:

Acudir a una oficina física
La mayoría de las casas de bolsa tienen módulos para la atención a usuarios. Regularmente, con esta opción invertirás con la ayuda de un asesor que forma parte de la casa de bolsa.

Apps y plataformas de internet
Muchas casas de bolsa operan a través de internet. Estas opciones suelen cobrar menos comisiones y brindar acceso a sus servicios las 24 horas del día. Si eliges esta opción, te convertirás en inversionista independiente, ya que tú mismo podrás invertir en la bolsa.

Bróker o Asesor Financiero Independiente (AFI)
Es un profesional especializado en productos de inversión. Te ayudará a conformar una estrategia de inversión y se encargará, en tu representación, de los trámites de apertura de cuenta y de las operaciones de inversión. Considera que los brókeres siempre cobrarán comisiones por sus servicios.
En cualquiera de los casos, para abrir una cuenta necesitarás los siguientes documentos:
- Identificación oficial con fotografía
- Comprobante de domicilio
- Cuenta bancaria
- CURP
- RFC
Al firmar tu contrato de apertura, lee con cuidado los términos y condiciones y registra, por lo menos, a un beneficiario.

Ya sabes qué son las casas de bolsa y cómo abrir una cuenta para invertir. Ahora sí estás listo para subirte a los vehículos de inversión que te llevarán hasta tus metas.
Recuerda que las casas de bolsa no son juegos online. Al abrir una cuenta les das el poder de manejar tu dinero e información personal, y por ello, debes elegirlas con cuidado.
Verifica que estén constituidas bajo las normas mexicanas y reguladas por:
Secretaría de Hacienda y Crédito Público
Banco de México
Comisión Nacional Bancaria y de Valores